¿Soñabas de niño con tener tu propia casa del árbol? Pues hay algunos diseñadores que nunca han dejado de hacerlo. Desde estructuras de cristal hasta las más extrañas habitaciones de hoteles, te mostramos algunos de los mejores diseños de casas en los árboles.
1. La casa cilíndrica de Aibek Almasov
Así como lo ves, este año el grupo de diseñadores de Aibek Almasov, oriundo de Kazajistán, presentó su proyecto para construir una casa de vidrio, en forma de cilindro, alrededor de un árbol. Toda la fachada, de forma circular, rodeará al árbol entero, desde el tronco inferior a las ramas superiores.
Con un diseño que busca reinventar el concepto clásico de la casa del árbol, este hogar transparente se fusionará armoniosamente con sus alrededores, y -según sus arquitectos- funcionaría con fuentes de energía renovables.
Además de valerse de fuentes de calefacción geotérmica, que permitirá aprovechar el calor natural del suelo para calentar los ambientes, la estructura estará totalmente rodeada de vidrio de control solar, para captar la luz y proveer el resto de la energía necesaria.
Esta curiosa casa del árbol se compondrá de cuatro niveles y costará unos 300.000 dólares construirla, tres veces menos que otras casas de la zona, en las montañas de Almaty. Por otra parte, los diseñadores prometen que su construcción también tendrá pocas repercusiones sobre la tierra, ya que será prefabricada en un espacio especial para ello, lejos del entorno en el cual finalmente será instalada.
Eso sí, ¿para mantener la privacidad? Pues habrá que instalarle algunas cortinas.
2. Las colmenas de Rojkind Arquitectos
En uno de sus últimos proyectos, el increíble grupo de diseñadores de Rojkind Arquitectos, de México, presentó a uno de sus clientes una casa del árbol. En su diseño, la casa consiste en tres espacios tipo colmena, organizados en círculos concéntricos que forman una especie de trébol.
Con el objetivo de servir a las hijas pequeñas de su cliente, las tres secciones resultantes proporcionarán a cada una un espacio de juego separado de los otros.
La estructura fue diseñada para ser impresa en 3D sobre tableros de fibra de densidad media, es decir, que la máquina de impresión 3D se encargó de cortar los aglomerados de fibra de madera y resinas sintéticas, y luego los mismos diseñadores se encargaron de montar el resultado final en el jardín del cliente.
¿Crees que les habrá gustado a las niñas?
3. El cubo de espejos, en Suecia
Si algún día estás paseando por Suecia, te sobran algunos dólares y necesitas dónde hospedarte, Treehouse Hotel tal vez tenga el lugar justo para ti. Este curioso hotel tiene la particularidad de que sus cinco habitaciones se encuentran construidas como si fueran casas del árbol, suspendidas sobre los troncos e, incluso, con varios motivos diferentes para satisfacer todos los gustos.
Diseñadas por los mejores arquitectos escandinavos y construidas en 2010, las habitaciones llevan los nombres como “la cabina”, “el cubo espejo”, “el nido del ave”, “el cono azul” y “el OVNI”. Además de estas habitaciones, el hotel cuenta con un sauna para 12 personas, situado entre los centenarios pinos del bosque sueco.
¿Y qué hay de las habitaciones? Como mencionamos, cada una de ellas es única en su diseño interior y varía en el tipo de muebles, iluminación y telas utilizadas. Sin embargo, todas ellas tienen entre 15 y 30 metros de tamaño, y las más grandes pueden albergar hasta a cuatro personas.
Tal vez una de las más interesantes de las habitaciones construidas por el hotel hasta la fecha sea “el cubo de espejo”. Este insólito cuarto consiste, básicamente, en un impresionante cubo de 4 x 4 x 4 metros suspendido entre los árboles, con paredes espejadas para reflejar los alrededores.
La estructura se sostiene sobre una base de aluminio entre los árboles, mientras que, en su interior, los huéspedes pueden disfrutar de seis ventanas con vista panorámica. Además de la capacidad para cuatro personas, el cubo tiene una sala de estar y su parte superior funciona como terraza.
Otra de las habitaciones del Treehotel es “el nido del ave”. Esta vez, el intento de fusionar el diseño con la naturaleza es más evidente y a todas luces más exitoso: la habitación parece, literalmente, un nido gigante y, si no fuera por su enorme tamaño, se camuflaría perfectamente con sus alrededores.
La habitación tiene estructura circular y un interior espacioso, pensado especialmente para albergar a una familia tipo con dos hijos pequeños. Con unos 17m² de superficie y sus propios baños, los cuatro huéspedes pueden acceder al interior del cuarto desde el exterior a partir de una escalera retráctil.
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