Su arquitectura emociona, sorprende, impresiona… Es Gábor Városi, pintor
de carrera, artista y arquitecto por pasión, y como tal, creador de dos
apartamentos con aires de villa experimental en el nobilísimo barrio
residencial de Svábhegy, Budapest.
En realidad, Gábor Városi es pintor de carrera, escultor, fotógrafo y,
especialmente hoy, apasionado arquitecto. Le encanta el diseño poco
convencional, jugar con formas y colores. Además de su ocupación como docente
en relación a la tesis de su máster en el campo del arte, la estética y la
historia del arte, el húngaro inicialmente estudió pintura clásica en la
Academia de Bellas Artes de Budapest. “Desde mi infancia me apasionan las
composiciones con diversos géneros”, confiesa quien hoy es padre de una niña.
Es la conexión primaria de la arquitectura con el arte la que se resuelve en su
propio estilo arquitectónico. Considera los inmuebles como esculturas y,
ciertamente, no es un hecho completamente desinteresado que a menudo sea su
propio cliente. El porqué: “He sido mi propio cliente para la mayoría de mis
diseños y, por lo tanto, he podido poner en práctica todas mis locuras. Sin
más”, cuenta Városi.
“Desde la infancia me apasionan las composiciones con géneros diversos como la pintura, la historia del arte y la arquitectura”. GÁBOR VÁROSI |
Mis diseños son liberados de cualquier restricción con el fin de procurar placer visual y la máxima funcionalidad”. GÁBOR VÁROSI
Fuente:www.gg-magazine.com
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