Los sistemas de automatización hogareña, tan ampliamente difundidos y aceptados en mercados como el europeo o el estadounidense, no han conseguido aún penetrar masivamente en Latinoamérica, producto de los costos, por un lado, y cierto prejuicio cultural de que la domótica pudiese complicar antes que facilitar la vida en el hogar.
También sucede que incorporar un sistema domótico durante la construcción de la vivienda es relativamente simple y lo más conveniente. En cambio, si la casa ya está construida y habitada, la posibilidad se complica radicalmente.
Webee, el origen
Cuando en 1999 Lucas Funes planteó su tema de tesis, surgió la idea de desarrollar un sistema domótico que se adaptara a lo que el usuario podía esperar de esta tecnología, y que además llegase al mercado a un costo que permitiera su masificación en todos los mercados. Allí comenzó el camino de Webee. Hoy, forman parte del equipo una decena de profesionales, entre ellos Federico Ferral, joven y destacado emprendedor local que lleva adelante empresas como Junot y Croppers, y es quien está a cargo de la inserción internacional de la marca.
“Normalmente, los sistemas de domótica exigen tener conocimientos técnicos para programarlos; entonces, si alguien quiere cambiar un escenario lumínico grabado, tiene que llamar a un técnico, y las personas viven diferentes experiencias en sus casas. Hasta es posible que cada integrante necesite un escenario diferente al llegar a su hogar”, comienza describiendo Lucas, y agrega: “Diseñamos una tecnología y un modelo de negocios, para un producto de consumo masivo y escalable, que se instala sin tener conocimientos técnicos. Lo que con otros sistemas cuesta 30 mil dólares, con el nuestro cuesta mil”.
Cómo funciona
Webee es un sistema domótico de inteligencia distribuida, ya que cada uno de los dispositivos que forman parte son programables y pueden funcionar de manera autónoma. Como en todo sistema de este tipo, debe existir un canal de comunicación entre los dispositivos, en este caso es inalámbrico, y se vale de distintos estándares probados internacionalmente: ZigBee, Z-Wave y Wi-Fi. Esto permite contar con dispositivos propios e incorporar otros de cientos de fabricantes a nivel mundial, que utilizan los mismos protocolos de comunicación. Así, Webee está en continuo crecimiento. “Vamos incorporando dispositivos de otros fabricantes permanentemente, y sus drivers se actualizan desde la nube”, explica Lucas, remarcando que cada unidad central instalada (llamada “Boss”) está recibiendo permanentes actualizaciones de librerías de productos y aprendiendo cómo los usuarios utilizan el sistema. “A los 90 días de instalado, Webee comienza a sugerir distintas configuraciones sobre la base de lo que ha aprendido en ese hogar; por eso, decimos que logramos la ‘auténtica casa inteligente’”, afirma su creador.
Dotando la casa de inteligencia
Al no requerir cableado adicional, el sistema ideado por Lucas Funes permite “domotizar” cualquier vivienda mediante una serie de pequeños aparatitos que dotan de inteligencia a los dispositivos que ya existen en el hogar. A la vez, identifica e integra dispositivos que ya cuenten con inteligencia, como los smart TV.
“El proceso es simple: se conectan los dispositivos, se instala la aplicación en el teléfono y, al encender la unidad central (el “Boss”), escanea toda la casa buscándolos. Al detectarlos, aparecen en la pantalla del teléfono y el usuario puede nombrarlos (lámpara del living, control de temperatura, sensor de presencia, sensor de monóxido, entre otros) y allí los activa dentro del sistema”, describe Lucas, y agrega que luego todos los equipos que forman parte del sistema se pueden integrar en grupos, para generar escenarios que se activan con un solo comando.
Asimismo, los dispositivos de Webee permiten controlar lámparas ON-OFF o regular su intensidad lumínica; también pueden tomar control de motores, ya sean de aberturas automatizadas, heladeras o aire acondicionados.
Comprar y financiar
Los desarrolladores de Webee han apostado al financiamiento colectivo, con el fin de ingresar al mercado norteamericano para luego extenderse a Latinoamérica. En el sitio Indiegogo.com es posible adquirir distintos kits de productos. La unidad Boss se puede adquirir por $ 870. El kit de seguridad que incluye un Boss, un Smart Station y dos sensores magnéticos por $ 1.471 (precios equivalentes en dólares, incluyendo el 35 por compra en el exterior).
Fuente:http://www.lavoz.com.ar/
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