viernes, 13 de diciembre de 2013

Reciclan espacios con “pocket parks” en el DF


Bajo el principio de ser sustentables, accesibles y equipados con materiales reciclables, al igual que Bogotá, Nueva York y Hong Kong, el Distrito Federal apuesta por los llamados pokets parks o parques de bolsillo y ya tiene proyectados los primeros 156. Son una conversión de pequeñas superficies remanentes, subutilizadas, abandonadas o invadidas por automóviles, a espacios recreativos de entre 100 y 400 m² que se integrarán a la arquitectura urbana de cada zona.

El prototipo fue inaugurado en el Centro Histórico, frente a la Plancha del Zócalo capitalino, y la semana próxima estará listo otro en avenida Centenario y Aguayo, en Coyoacán, para después continuar con el de Avenida México y Vicente Guerrero, lugar que actualmente es ocupado para estacionar autos y motos.

“Este (el del Zócalo) era un estacionamiento, recuperamos un espacio urbano invadido para beneficio de la ciudad, hay reordenamiento vial y seguridad peatonal, la gente no sabía por dónde cruzar. Es equipamiento para promover otro tipo de transporte sustentable como la bicicleta, el tema ambiental, especies naturales de bajo mantenimiento, sirve de vinculación social, seguridad y embellecimiento urbano”, dijo Eduardo Aguilar, titular de la Autoridad del Espacio Público (AEP).

Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo y Azcapotzalco serán las próximas demarcaciones en donde realizarán estas intervenciones del espacio público. Para su puesta en marcha, la AEP, instancia dependiente de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), se basó en un estudio de “vida pública”.



“Hicimos un convenio con el Centro de Transporte Sustentable (CTS), que es una ONG internacional, e hizo un estudio de vida pública que vamos a presentar el próximo jueves; es sobre cómo vivimos en el DF, en qué horario y qué tipo de actividades realizamos en los espacios públicos”, adelantó Aguilar. Para contrarrestar la falta de áreas verdes en algunas zonas de la capital, por causa del crecimiento y urbanización acelerados, los pocket parks estarán en 145 colonias en las 16 delegaciones, con sitios susceptibles a transformarse en zonas de disfrute y naturadas.

Su costo en promedio es de un millón 300 mil pesos, el metro cuadrado oscila entre 500 y mil. Algunos serán financiados por el GDF, pero aplicarán distintos esquemas de participación privada e incluso fondos federales. El titular de la AEP comentó que el mantenimiento de estos lugares correrá a cargo de esta instancia y en ciertos casos de las delegaciones. “Estamos viendo un esquema en donde puedan participar algunos comercios o locales, en uno de los programas es zona de comida, que ellos participen con el mantenimiento general y la limpieza, pero con la condición de que sea público el espacio. El que está en el Zócalo es un muestrario, no quiere decir que en todos vaya a haber juegos infantiles y gimnasios. Los hay en Nueva York y Hong Kong, y aquí está siendo un éxito”, apuntó Eduardo Aguilar en entrevista.

Un parque de bolsillo debe cumplir con lineamientos como proceso de gestión, la elección del lugar, medidas, mobiliario, paleta vegetal, entre otros. Pueden ser limitados (entre dos predios), en esquinas o abiertos en esquinas que se prolonguen hacia la calle; también están los de contenido, instalados entre edificios. Tiene que ser visible desde la calle, fácil de usar y amigable, con accesibilidad, con líneas de transporte público cercanas, de preferencia que esté próximo a zonas de comida o comercios. El mobiliario de estos espacios es de bajo mantenimiento, confortable, durable para la intemperie, fijo al piso y seguro.



Integrantes de la Sociedad de Arquitectos Paisajistas de México han calificado como positiva la aplicación de este programa, aunque señalan que deben ser útiles para los ciudadanos y ubicarse en zonas accesibles, para que no suceda lo mismo que con los “gimnasios urbanos” y camellones con juegos infantiles instalados por la pasada administración en medio de vialidades primarias.

Además de la recuperación del espacio público, una de las motivaciones para instalar los parques de bolsillo en la capital del país es el déficit de zonas naturadas. La Ciudad de México tiene 5.2 m² de áreas verdes por habitante, mientras que la Organización Mundial de la Salud recomienda que sea entre 10 y 15 m², pues la falta de éstas contribuyen al aumento en los niveles de estrés y contaminación en las grandes urbes. Benito Juárez y Cuauhtémoc cuentan con 3.3 y 3.5 m² de zonas arboladas por habitante respectivamente, y son las delegaciones con menor proporción; presentan poca oferta Azcapotzalco, Iztacalco e Iztapalapa, pero no A. Obregón y Cuajimalpa, con 35.8 y 36.7 m² cada una.

Piden seriedad

Daniel Gershenson, presidente de la asociación civil Alarbo comentó que los parques de bolsillo son proyectos sólo para recuperar espacio público, pues su aportación ambiental no pesa. “Estos parques son espacios que no aportan nada a la recuperación de la biomasa que se ha ido perdiendo no sólo en el DF, es un fenómeno que sufrimos en todo el país. Jardinar, poner pastito y una banca enfrente de un restaurante, por ejemplo en la Condesa, no compensa nada. Lo que se tiene que hacer es una campaña seria de recuperación de áreas verdes y plantando de especies que nos proporcionen sombra y capturen las partículas suspendidas, muchos de estos espacios que tienen bancas son lugares en donde se pueden sentar, pero no sustituyen el arbolado que seguimos perdiendo”, comentó Gershenson.

Asimismo urgió al GDF a encabezar un verdadero proyecto de recuperación de áreas naturadas y evitar la tala de más árboles para construir edificios. “No hay un compromiso serio que haya visto en estos meses para rehabilitar y compensar un daño irreparable: tirar árboles para construir edificios. Esto es una simulación, hay que comprometerse con una visión más sustentable”, sostuvo.

El ABC del pocket park

Con el fin de homologar los criterios de diseño, imagen urbana, accesibilidad universal, seguridad, mobiliario, vegetación y revisar ubicaciones, la Autoridad del Espacio Público (AEP) elaboró un manual técnico para la creación de parques de bolsillo.
Hace unos días, Eduardo Aguilar, titular de la AEP, y representantes de las demarcaciones, visitaron el primer sitio intervenido en el Centro Histórico y participaron en el taller “Lineamientos de Parques Públicos de Bolsillo”.

Este documento fue repartido a los titulares de las 16 demarcaciones y contiene información sobre cómo se deben hacer estos espacios, las dimensiones, elección de lugares, tipos de pavimento, plataformas, selección vegetal con fichas técnicas, tipo de mobiliario y materiales.

“Para el programa de los parques de bolsillo estamos definiendo un manual técnico para la puesta en marcha de los mismos, identificando las zonas con potencial para cada delegación. Estamos trabajando con representantes, viendo especificaciones técnicas para homologarlos. Hay que identificar los puntos precisos en las colonias. Tenemos identificadas 143 colonias; el jefe de Gobierno, durante la campaña, identificó los puntos que piden espacios públicos y ésta es una de las alternativas para cumplir con el tema”, explicó Aguilar.

En el manual incluyen aspectos como las adecuaciones geométricas, accesos, rampas peatonales, balizamiento y circulaciones, además de la vocación de cada parque. Para la selección de vegetación deberá seguir lo estipulado en las Norma Ambiental para el Distrito Federal NADF-006-RNAT-2004. También establece que en un plazo de un año realizarán la evaluación de los parques de bolsillo, para conocer el nivel de aceptación por parte de la comunidad.

Las mediciones se harán tomando en cuenta el número de personas que utilizan el espacio y los horarios, el tipo de uso, nivel de limpieza y estado de deterioro (mobiliario, vegetación, pavimentos). A nivel internacional, los parques de bolsillo han proliferado. Tan sólo en Bogotá hay más de mil 700, de los cuales 70 por ciento consisten sólo en zonas verdes y 30 por ciento fueron concebidos para la recreación para niños y deporte. Sin embargo, el mobiliario, la infraestructura, el mantenimiento y la seguridad son aspectos que aún siguen en ajuste y evaluación.

0 comentarios:

Publicar un comentario